17 de octubre, 2014

Survivor: The Living Dead
Pyroclastic
2011
Terror
digital
www.
Survivor: The Living Dead
Survivor: The Living Dead

Se acerca la noche de difuntos, y como cada año, quiera o no, esa cosa llamada world wide web acerca Halloween a mi casa. No sólo esta, he adoptado toda fiesta americana: Pascua: descuentos en Steam. Viernes negro: ofertas en Steam. Halloween como es este caso, check. Hanukkah, ofert… ejem. Total que estoy repleto de espíritu jalobuinero (añade eso RAE), así que repaso los 347 juegos en mi disco duro buscando pequeñas piezas de terror, mejor gratuitas, porque pronto se agolparán a mi puerta y a mis ventanas las susodichas ofertas de jalobuin. Golpearán intentando entrar mientras emiten un sólo mantra gutural: ¡CARTEEEERAAAAS!

Survivor: The Living Dead, es un pequeño juego indie de un aún más pequeño desarrollador de los que antes etiquetábamos como amateur. Es una pieza breve del 2011 fuertemente inspirada en La Noche de los Muertos Vivientes (Gorge A. Romero, 1968), que cuenta la historia de una voluptuosa joven que viaja junto con su hermano a un cementerio para visitar a su difunta madre. Pero hete aquí que un caminante revivido devora a su hermano y nuestra protagonista debe huir de la creciente marabunta de caminantes que se olfatea en el horizonte para refugiarse en una casa de dos plantas sospechosamente repleta de armas. ¿Te suena?

El esquema de control del juego es limitado en cuanto a agilidad de uso, y a la par complejo. Además de los cursores tiene cuatro botones, uno para correr, otro para dejar objetos y otros dos de ellos sobrecargados, la tecla de acción que sirve para disparar, examinar, registrar, tomar posesión de los objetos, y levantar puertas, y el botón de miscelánea con el cual podrás subir y bajar escaleras, debloquear puertas, y en un alarde de más difícil todavía, en conjunción con abajo sirve para hacer acciones con los objetos del inventario. Sobrecargar es un término de programación que se usa cuando una función tiene más utilidad de la cuenta. Que a veces es útil, pero también se suele considerar una síntoma de falta de elegancia. En la interfaz de un juego la sobrecarga es síntoma de un mal diseño de interfaz. ¡Tío, tienes ya cuatro botones! Lo cual se explica, como hemos dicho, etiquetando al autor como amateur. Pero por otro lado puede ser indicativo de que el autor conoce muy bien el género y conoce muy bien como hacer un juego de terror que genere gran tensión.

Recuerda, un esquema de control muy limitado es un pilar del género. En Doom 3 no se puede llevar la linterna a la par que portas un arma, es absurdo pero funciona como juego. La serie Resident Evil con el control tanque, de movimiento poco ágil y sin poder caminar y disparar a la vez. Dead Space donde Isaac se mueve como un gran simio embutido en un tosco traje espacial (lo que es). Survivor: The Living Dead hace un gran trabajo al respecto. Todo son limitaciones, el control es un asco, no se puede interactuar con el entorno mientras portas un arma, estas se rompen o tienen poca munición, las formas de bloquear las puertas son escasas, y para colmo si te muerden entra en juego un factor más para acabar con tu vida: la infección. Todo ese meollo y trajín de teclas ocurre mientras los zombies aporrean las puertas o se acercan inexorablemente.

La gran protagonista del juego no son las curvas de la chica, es la casa. Tiene un grado de simulación más que aceptable. Hay implementadas diversas soluciones para detener el avance zombie: puedes empujar el armario por el balcón para aplastar a los zombies que se agolpan en la puerta, puedes dejar el gas de la cocina abierto para reventarla exterminando a todo ser que esté de paso, con los tablones fruto de esta destrucción puedes atrancar las puertas, estas pueden volver a ser levantadas y aseguradas cuando los zombies la derriban para entrar. Todo ello aderezado con un buen uso de la música y los sonidos, y un arte pixelado muy notable para los escenarios (aunque no para los personajes). En definitiva: pura diversión para el amante del género.

Es un juego breve con el único objetivo de sobrevivir lo suficiente hasta que llegue el ejército. Sobrevive 12 minutos y desbloqueas 14, tiene logros, recompensas, zombies especiales, más armas, un diseño moderno que asegura una larga vida a pesar de la brevedad del escenario. Por desgracia, como decía al principio, el autor Craig Daversa (Pyroclastic) no es más que otro desarrollador amateur que tiró la toalla en su día, quién sabe si para volver o no, con lo cual no hay sitio oficial del cual descargar el juego. Pero fue lo bastante popular como para que esté subido en servidores de descargas si buscas el juego en Google.

Acerca de Ruber Eaglenest


Es diseñador de videojuegos, co-fundador de la compañía familiar Wingless Little People. Editor de Indie-o-rama, crítico, escritor, y entrevistador, además es autor de Ficción Interactiva (o Aventuras Conversacionales) y teórico del medio, donde es conocido como El Clérigo Urbatain. En sus ratos libres es arqueólogo de mundos video-lúdicos virtuales.

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